A día de hoy, los precios del petróleo crudo WTI han experimentado una caída del 2.6%, ubicándose en torno a los 70.6 USD por barril. Este descenso se atribuye a una combinación de factores, como la desaceleración económica global y una posible reducción en la demanda de petróleo. Además, los inventarios de crudo en Estados Unidos han disminuido, lo que podría generar presiones sobre la oferta.
A pesar de esta caída reciente, persiste un optimismo moderado en el mercado, con la expectativa de que los precios podrían aumentar nuevamente. Esto se debe a las tensiones geopolíticas y a la incertidumbre sobre las decisiones de los principales productores de petróleo, como los miembros de la OPEC+. La situación actual refleja un mercado volátil, influenciado por factores económicos y políticos internacionales. Aunque los precios han sufrido ajustes a la baja, la dirección futura del mercado dependerá de cómo se desarrollen estos factores globales.